Querido soñador; he leído tu carta y te agradezco tus palabras. He escuchado tus músicas y tus cantos y suenan en mis oídos bellas canciones, algunas con ciertos aires bien tradicionales, de murgas y corsos que aún resisten no solo en vuestra porteñidad sino por todos los rincones por donde el carnaval se celebra. Tradiciones que no han de morir jamás porque están en el espíritu de nuestra gente. Ponerle música y poesía en estos días de Febrero en que el carnaval reina en nuestros corazones es una tarea admirable. Sé que lo vienes haciendo desde hace más de treinta años, por lo cual te has ganado ya un destacado lugar aquí a mi lado.
Me resulta sumamente interesante que hayas escarbado en la lírica de algunos poetas que incluso han dejado su existencia en medio de tan loable tarea como la de poner versos a estas métricas carnavaleras, como por ej. las de Roberto Santoro, Rubén Espiño, Jesús Pascual y demás noveles colegas como tu ex compinche y compañero de “La Fuente” el querido Uki Tolosa.
Sé también que hubo espacio no solo para murgueros, bailarines y percusionistas como los chicos de “Escuela Clave”, ya que he visto que la presentación tuvo sus matices, con fondo de luna llena, en medio de sutiles y refinadas canciones y que formaron un todo, bajo lo que Uds. llaman una “obra conceptual”. Mucho papel picado, serpentinas, “carnaval de banderines” que adornaron la sala, artesanías alegóricas y el desparpajo de los saltimbanquis en medio de un corso a contramano encandilados por las voces de los chicos del coro “La Matraca”.
Pero no quería terminar esta carta sin destacar que mas allá de la puesta en escena y de lo bien logrado que estuvieron los distintos climas por los que recorrieron, me atrevo a decir que lo que más me ha encantado es reconocer en todo ello, querido Coco, tu propio sello musical; tu impronta que te caracteriza y distingue; no solo bajo las luces de este espectáculo, sino mas bien, de lo que has venido logrando a lo largo de toda tu carrera como músico, cantante y compositor. Todo tiene tu sello, tu ADN musical.
Y eso es lo que te distingue como artista. Eso es lo que te convierte en realidad en artista.
Así que mi querido heredero, como todo cumple un ciclo nos volveremos a ver las caras en el próximo carnaval para que nuestra pasión siga latente, tan latente como desde aquella vieja murga que viste de chiquilín en Villa Urquiza, y quedaste extasiado, hasta nuestros días en que el espíritu del carnaval no apague nunca su llama en nuestros corazones.
Hasta el próximo carnaval.
“Quiero vivir en el reinado del Dios Momo. Quiero ser húsar de su ejército endiablado”.
Me resulta sumamente interesante que hayas escarbado en la lírica de algunos poetas que incluso han dejado su existencia en medio de tan loable tarea como la de poner versos a estas métricas carnavaleras, como por ej. las de Roberto Santoro, Rubén Espiño, Jesús Pascual y demás noveles colegas como tu ex compinche y compañero de “La Fuente” el querido Uki Tolosa.
Sé también que hubo espacio no solo para murgueros, bailarines y percusionistas como los chicos de “Escuela Clave”, ya que he visto que la presentación tuvo sus matices, con fondo de luna llena, en medio de sutiles y refinadas canciones y que formaron un todo, bajo lo que Uds. llaman una “obra conceptual”. Mucho papel picado, serpentinas, “carnaval de banderines” que adornaron la sala, artesanías alegóricas y el desparpajo de los saltimbanquis en medio de un corso a contramano encandilados por las voces de los chicos del coro “La Matraca”.
Pero no quería terminar esta carta sin destacar que mas allá de la puesta en escena y de lo bien logrado que estuvieron los distintos climas por los que recorrieron, me atrevo a decir que lo que más me ha encantado es reconocer en todo ello, querido Coco, tu propio sello musical; tu impronta que te caracteriza y distingue; no solo bajo las luces de este espectáculo, sino mas bien, de lo que has venido logrando a lo largo de toda tu carrera como músico, cantante y compositor. Todo tiene tu sello, tu ADN musical.
Y eso es lo que te distingue como artista. Eso es lo que te convierte en realidad en artista.
Así que mi querido heredero, como todo cumple un ciclo nos volveremos a ver las caras en el próximo carnaval para que nuestra pasión siga latente, tan latente como desde aquella vieja murga que viste de chiquilín en Villa Urquiza, y quedaste extasiado, hasta nuestros días en que el espíritu del carnaval no apague nunca su llama en nuestros corazones.
Hasta el próximo carnaval.
“Quiero vivir en el reinado del Dios Momo. Quiero ser húsar de su ejército endiablado”.
Presentación del CD “Carta de Momo” de Coco Romero. Centro Cultural Rector Ricardo Rojas, Bs.As. 26 y 27 de Febrero de 2016. Ficha Técnica: Coco Romero: guitarra y voz. Pedro Bragán piano y acordeón. Federico Palmero: guitarras. Cacho Ferreyra: saxos y flauta traversa. Emilio Pita: batería. José María Rios: bajo y producción musical. Coro “La Matraca”: Vito Cafici, Daniel Morgana, Gustavo Lifchitz y Luciano Rosini. Bombo al plato: Juan Brusse.
Saludos de Edy Rodríguez.
Saludos de Edy Rodríguez.
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