Gualberto “Coco” Romero vino a presentar su libro sobre la murga: “el carnaval es la síntesis más integradora del arte”
Habló este mediodía con infoeme.com y le dijo que cree que “la movilización de miles de pibes que resisten haciendo murga es todo un cambio”. Y aseguró que “la relación entre arte y Estado es mala porque a político no le interesa la educación y la curación que genera el arte”. El docente del Rojas recorrió centenares de kilómetros en el interior para apoyar a nuevos grupos, pero ahora quiere “que de a poco crezcan otros arbolitos”. A las 18:00, estará en Insurgente.
Tiene 52 años, es salteño de nacimiento, hace 30 que trabaja con murgas en Buenos Aires y al pasar por Olavarría para presentar su último trabajo de investigación sobre la murga porteña, Gualberto Milagros “Coco” Romero dijo que ya está dejando de recorrer cada kilómetro de ruta y que espera “que poco a poco vayan creciendo otros arbolitos y que luego los que vayan llegando se lleven ramitas para hacerlas crecer”.
Romero tiene una charla programada para hoy sábado a las 18:00 en la Librería Insurgente (Belgrano 3345) y a horas de esa presentación de su libro le dijo a este Diario On Line que “la relación entre el Estado y el arte no es buena porque al político no le interesa ni la capacidad educativa ni sanadora que tiene el arte”.
Romero aseguró que “al político que ocupa los cargos de Estado lo que le interesa es hacer una espectáculo de carnaval donde 5 millones de personas vayan a ver a 3 artistas, pero las posibilidades educativas que una murga tiene para sus participantes no le interesan”.
Para el murguista, que es desde hace años docente del Instituto Cultural Rojas de la ciudad de Buenos Aires, la relación entre dictadura y carnaval es compleja y cree que en el último período militar se prohibió esa manifestación popular para aprovechar su propia declinación.
“De las entrevistas y trabajos de campo que he realizado surge que luego de los 60 ya no había ninguna actividad posible para las murgas en la Argentina de esa época, con lo cual los militares no hacen más que prohibir lo que ya casi no existía. Si hubieran prohibido algo que tenía vigor la gente hubiese resistido”, señala el músico y estudioso.
Por eso celebró “a capacidad de resistencia y la energía que tienen las murgas y la gente, los miles de jóvenes que en todos lados las animan. El carnaval es la fiesta más integradora del arte, pero a pesar de que el carnaval son también comparsas, máscaras, arte y otras manifestaciones, la murga es la estrella de todo ese firmamento artístico”.
Un perfil de Coco Romero
Gualberto Elio Milagro es su nombre original. Nació en Salta, pero se crió en la Capital Federal. Es músico, investigador y docente del Centro Cultural “Ricardo Rojas” de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Realizó viajes de investigación a Río de Janeiro y San Pablo (Brasil), Distrito
Federal y Guadalajara (México), Oruro (Bolivia), Cádiz (España), La Habana y Santiago (Cuba). Brinda asistencia técnica a distintos grupos carnavaleros de la Capital y del interior del país.
Editó desde el ‘95 una revista especializada en temas relativos al Carnaval y a las Murgas, “el Corsito”, donde se dan noticias, se exponen ensayos, y se analizan las cuestiones artísticas que rodean al fenómeno.
Grabó tres discos con el grupo “La Fuente” y dos CD como solista: “La Fuente” (1981); “El Grito Primal” (1983); “La Pasión según San Juan” (1983); “Murga, Vuelo brujo”, con el grupo “Yo lo vi” (1994); “La Sopa de Solís”, con la banda “La Brillante” (1999); y “Pacha Momo” (2004), en el que recorre parte del cancionero carnavalero de los últimos 70 años junto al coro “La Matraca”.
En Olavarría presentará su libro de investigaciones sobre la murga porteña.
EL DOCENTE DEL ROJAS DA UNA CHARLA EN OLAVARRÍA
Gualberto “Coco” Romero vino a presentar su libro sobre la murga: “el carnaval es la síntesis más integradora del arte”
Habló este mediodía con infoeme.com y le dijo que cree que “la movilización de miles de pibes que resisten haciendo murga es todo un cambio”. Y aseguró que “la relación entre arte y Estado es mala porque a político no le interesa la educación y la curación que genera el arte”. El docente del Rojas recorrió centenares de kilómetros en el interior para apoyar a nuevos grupos, pero ahora quiere “que de a poco crezcan otros arbolitos”. A las 18:00, estará en Insurgente.
Tiene 52 años, es salteño de nacimiento, hace 30 que trabaja con murgas en Buenos Aires y al pasar por Olavarría para presentar su último trabajo de investigación sobre la murga porteña, Gualberto Milagros “Coco” Romero dijo que ya está dejando de recorrer cada kilómetro de ruta y que espera “que poco a poco vayan creciendo otros arbolitos y que luego los que vayan llegando se lleven ramitas para hacerlas crecer”.
Romero tiene una charla programada para hoy sábado a las 18:00 en la Librería Insurgente (Belgrano 3345) y a horas de esa presentación de su libro le dijo a este Diario On Line que “la relación entre el Estado y el arte no es buena porque al político no le interesa ni la capacidad educativa ni sanadora que tiene el arte”.
Romero aseguró que “al político que ocupa los cargos de Estado lo que le interesa es hacer una espectáculo de carnaval donde 5 millones de personas vayan a ver a 3 artistas, pero las posibilidades educativas que una murga tiene para sus participantes no le interesan”.
Para el murguista, que es desde hace años docente del Instituto Cultural Rojas de la ciudad de Buenos Aires, la relación entre dictadura y carnaval es compleja y cree que en el último período militar se prohibió esa manifestación popular para aprovechar su propia declinación.
“De las entrevistas y trabajos de campo que he realizado surge que luego de los 60 ya no había ninguna actividad posible para las murgas en la Argentina de esa época, con lo cual los militares no hacen más que prohibir lo que ya casi no existía. Si hubieran prohibido algo que tenía vigor la gente hubiese resistido”, señala el músico y estudioso.
Por eso celebró “a capacidad de resistencia y la energía que tienen las murgas y la gente, los miles de jóvenes que en todos lados las animan. El carnaval es la fiesta más integradora del arte, pero a pesar de que el carnaval son también comparsas, máscaras, arte y otras manifestaciones, la murga es la estrella de todo ese firmamento artístico”.
Un perfil de Coco Romero Gualberto Helio Milagro es su nombre original. Nació en Salta, pero se crió en la Capital Federal. Es músico, investigador y docente del Centro Cultural “Ricardo Rojas” de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Realizó viajes de investigación a Río de Janeiro y San Pablo (Brasil), Distrito Federal y Guadalajara (México), Oruro (Bolivia), Cádiz (España), La Habana y Santiago (Cuba). Brinda asistencia técnica a distintos grupos carnavaleros de la Capital y del interior del país.
Editó desde el ‘95 una revista especializada en temas relativos al Carnaval y a las Murgas, “el Corsito”, donde se dan noticias, se exponen ensayos, y se analizan las cuestiones artísticas que rodean al fenómeno.
Grabó tres discos con el grupo “La Fuente” y dos CD como solista: “La Fuente” (1981); “El Grito Primal” (1983); “La Pasión según San Juan” (1983); “Murga, Vuelo brujo”, con el grupo “Yo lo vi” (1994); “La Sopa de Solís”, con la banda “La Brillante” (1999); y “Pacha Momo” (2004), en el que recorre parte del cancionero carnavalero de los últimos 70 años junto al coro “La Matraca”.
En Olavarría presentará su libro de investigaciones sobre la murga porteña.
Tiene 52 años, es salteño de nacimiento, hace 30 que trabaja con murgas en Buenos Aires y al pasar por Olavarría para presentar su último trabajo de investigación sobre la murga porteña, Gualberto Milagros “Coco” Romero dijo que ya está dejando de recorrer cada kilómetro de ruta y que espera “que poco a poco vayan creciendo otros arbolitos y que luego los que vayan llegando se lleven ramitas para hacerlas crecer”.
Romero tiene una charla programada para hoy sábado a las 18:00 en la Librería Insurgente (Belgrano 3345) y a horas de esa presentación de su libro le dijo a este Diario On Line que “la relación entre el Estado y el arte no es buena porque al político no le interesa ni la capacidad educativa ni sanadora que tiene el arte”.
Romero aseguró que “al político que ocupa los cargos de Estado lo que le interesa es hacer una espectáculo de carnaval donde 5 millones de personas vayan a ver a 3 artistas, pero las posibilidades educativas que una murga tiene para sus participantes no le interesan”.
Para el murguista, que es desde hace años docente del Instituto Cultural Rojas de la ciudad de Buenos Aires, la relación entre dictadura y carnaval es compleja y cree que en el último período militar se prohibió esa manifestación popular para aprovechar su propia declinación.
“De las entrevistas y trabajos de campo que he realizado surge que luego de los 60 ya no había ninguna actividad posible para las murgas en la Argentina de esa época, con lo cual los militares no hacen más que prohibir lo que ya casi no existía. Si hubieran prohibido algo que tenía vigor la gente hubiese resistido”, señala el músico y estudioso.
Por eso celebró “a capacidad de resistencia y la energía que tienen las murgas y la gente, los miles de jóvenes que en todos lados las animan. El carnaval es la fiesta más integradora del arte, pero a pesar de que el carnaval son también comparsas, máscaras, arte y otras manifestaciones, la murga es la estrella de todo ese firmamento artístico”.
Un perfil de Coco Romero
Gualberto Elio Milagro es su nombre original. Nació en Salta, pero se crió en la Capital Federal. Es músico, investigador y docente del Centro Cultural “Ricardo Rojas” de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Realizó viajes de investigación a Río de Janeiro y San Pablo (Brasil), Distrito
Federal y Guadalajara (México), Oruro (Bolivia), Cádiz (España), La Habana y Santiago (Cuba). Brinda asistencia técnica a distintos grupos carnavaleros de la Capital y del interior del país.
Editó desde el ‘95 una revista especializada en temas relativos al Carnaval y a las Murgas, “el Corsito”, donde se dan noticias, se exponen ensayos, y se analizan las cuestiones artísticas que rodean al fenómeno.
Grabó tres discos con el grupo “La Fuente” y dos CD como solista: “La Fuente” (1981); “El Grito Primal” (1983); “La Pasión según San Juan” (1983); “Murga, Vuelo brujo”, con el grupo “Yo lo vi” (1994); “La Sopa de Solís”, con la banda “La Brillante” (1999); y “Pacha Momo” (2004), en el que recorre parte del cancionero carnavalero de los últimos 70 años junto al coro “La Matraca”.
En Olavarría presentará su libro de investigaciones sobre la murga porteña.
EL DOCENTE DEL ROJAS DA UNA CHARLA EN OLAVARRÍA
Gualberto “Coco” Romero vino a presentar su libro sobre la murga: “el carnaval es la síntesis más integradora del arte”
Habló este mediodía con infoeme.com y le dijo que cree que “la movilización de miles de pibes que resisten haciendo murga es todo un cambio”. Y aseguró que “la relación entre arte y Estado es mala porque a político no le interesa la educación y la curación que genera el arte”. El docente del Rojas recorrió centenares de kilómetros en el interior para apoyar a nuevos grupos, pero ahora quiere “que de a poco crezcan otros arbolitos”. A las 18:00, estará en Insurgente.
Tiene 52 años, es salteño de nacimiento, hace 30 que trabaja con murgas en Buenos Aires y al pasar por Olavarría para presentar su último trabajo de investigación sobre la murga porteña, Gualberto Milagros “Coco” Romero dijo que ya está dejando de recorrer cada kilómetro de ruta y que espera “que poco a poco vayan creciendo otros arbolitos y que luego los que vayan llegando se lleven ramitas para hacerlas crecer”.
Romero tiene una charla programada para hoy sábado a las 18:00 en la Librería Insurgente (Belgrano 3345) y a horas de esa presentación de su libro le dijo a este Diario On Line que “la relación entre el Estado y el arte no es buena porque al político no le interesa ni la capacidad educativa ni sanadora que tiene el arte”.
Romero aseguró que “al político que ocupa los cargos de Estado lo que le interesa es hacer una espectáculo de carnaval donde 5 millones de personas vayan a ver a 3 artistas, pero las posibilidades educativas que una murga tiene para sus participantes no le interesan”.
Para el murguista, que es desde hace años docente del Instituto Cultural Rojas de la ciudad de Buenos Aires, la relación entre dictadura y carnaval es compleja y cree que en el último período militar se prohibió esa manifestación popular para aprovechar su propia declinación.
“De las entrevistas y trabajos de campo que he realizado surge que luego de los 60 ya no había ninguna actividad posible para las murgas en la Argentina de esa época, con lo cual los militares no hacen más que prohibir lo que ya casi no existía. Si hubieran prohibido algo que tenía vigor la gente hubiese resistido”, señala el músico y estudioso.
Por eso celebró “a capacidad de resistencia y la energía que tienen las murgas y la gente, los miles de jóvenes que en todos lados las animan. El carnaval es la fiesta más integradora del arte, pero a pesar de que el carnaval son también comparsas, máscaras, arte y otras manifestaciones, la murga es la estrella de todo ese firmamento artístico”.
Un perfil de Coco Romero Gualberto Helio Milagro es su nombre original. Nació en Salta, pero se crió en la Capital Federal. Es músico, investigador y docente del Centro Cultural “Ricardo Rojas” de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Realizó viajes de investigación a Río de Janeiro y San Pablo (Brasil), Distrito Federal y Guadalajara (México), Oruro (Bolivia), Cádiz (España), La Habana y Santiago (Cuba). Brinda asistencia técnica a distintos grupos carnavaleros de la Capital y del interior del país.
Editó desde el ‘95 una revista especializada en temas relativos al Carnaval y a las Murgas, “el Corsito”, donde se dan noticias, se exponen ensayos, y se analizan las cuestiones artísticas que rodean al fenómeno.
Grabó tres discos con el grupo “La Fuente” y dos CD como solista: “La Fuente” (1981); “El Grito Primal” (1983); “La Pasión según San Juan” (1983); “Murga, Vuelo brujo”, con el grupo “Yo lo vi” (1994); “La Sopa de Solís”, con la banda “La Brillante” (1999); y “Pacha Momo” (2004), en el que recorre parte del cancionero carnavalero de los últimos 70 años junto al coro “La Matraca”.
En Olavarría presentará su libro de investigaciones sobre la murga porteña.
"La murga se escapó del carnaval" El músico, docente e investigador presentó ayer su libro "La murga porteña, historia de un viaje colectivo". Fue en el marco del encuentro Carnaval y Murgas que finalizará hoy en la plaza central de nuestra ciudad.
"Cuando no hay carnaval, la murga empieza a peregrinar buscándolo. Se escapa, y ahora convierte cada espacio en un espacio carnavalizado. Pero eso fue como consecuencia de la falta de ese espacio", sintetiza Coco Romero, docente, músico e investigador, que está desde ayer en Olavarría participando del encuentro Carnaval y Murgas que organiza la Librería Insurgente. El comentario es una de las conclusiones a las que arribó en su libro "La murga porteña, historia de un viaje colectivo", que ayer presentó en la casona de Belgrano 3345. "Las murgas generan microcarnavales", agrega Romero en charla con EL POPULAR. "Y el desafío es cómo podemos generar un momento donde explote la energía creativa de los miles de jóvenes que quiere proponer algo distinto", completa.
El encuentro Carnaval y Murgas comenzó ayer a las 18 con la charla de Romero y siguió con la proyección del documental platense "Toda dictadura prohíbe la alegría" y con una charla-debate, para culminar con la presencia de la murga olavarriense Arrebatando Lágrimas. El evento finalizará hoy. Desde las 16, en la plaza Aguado, se dictará un taller murga y a las 19.30 el espectáculo se trasladará a la plaza central, con la participación de "Arrebatando...", Los Revoltosos de Saavedra (Saladillo) y Los Sobrinos de Trompetín (Pringles). En caso de lluvia, las actividades se realizarán en Insurgente Eventos (9 de Julio 4154).
Hace 20 años que Coco Romero le da continuidad al tema de las murgas en la ciudad de Buenos Aires en el Centro Cultural Rojas, hasta que en 1996 se produce el boom y decide trasladarse al interior de la provincia. "Con la murga Los Quitapenas fuimos invitados a hacer dos Obras Sanitarias con Divididos, y cuando salimos al medio del estadio y vimos lo que pasó dije: 'Estalló'. Y al poco tiempo me dediqué a recorrer el interior", cuenta. Por eso está muy ligado a las murgas del interior y especialmente con Arrebatando Lágrimas.
Según Romero, "a partir de la democracia y de los nuevos circuitos de comunicación, el rock fue un gran desparramador de imágenes de la murga. Y después se dio una apropiación de los fondos musicales de la murga, con grupos como Bersuit, Los Piojos o Los Redondos, que hicieron circular por otras venas el tema. Por otro lado, en la provincia se dan fenómenos de carnaval muy interesantes. La murga es como invasora en este punto. En gran parte de la provincia no había murgas características".
Finalmente, uno de los referentes nacionales de la murga concluye que "en un calendario festivo de cualquier sociedad occidental y cristiana, el carnaval es muy importante. Es una confluencia del arte de los pueblos. En la Argentina pasa algo muy extraño. A partir de la década del 30, con la intromisión del Ejército, ya se prohíbe la máscara; en el 70 otra cosa y así... El carnaval es una fiesta y la fiesta tiene códigos. Y la única manera de aprender los códigos es haciéndolo. Lo que no hay que perder es la continuidad".
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